martes, 29 de enero de 2013

IMPUESTO A LA TENENCIA DE LOS BURROS.


Desde los tiempos del imperio romano, los excesos y la mala aplicación de los impuestos se asocian con tiranías, dictaduras y autoritarismo como el gobierno de Antonio López de Santana que llego a cobrar impuestos por la posesión de caballos, perros y demás animales domésticos.

Viene a cuento lo anterior porque el Congreso local de Sonora a propuesta del Gobernador Guillermo Padrés Elías, aprobó el aumento y creación de nuevas contribuciones entre otros destaca el impuesto a la producción, sacrificio y tenencia de ganado, particularmente la de los burros y otros equinos.

No cabe duda que a los congresos locales y a los gobernadores de las entidades federativas, pareciera que les tiene sin cuidado el futuro de sus poblaciones, endeudan sus haciendas públicas en el afán de salir bien librados en el corto plazo, se desempeñan como gobernantes ricos pero con gobiernos pobres, en tanto el Estado no tiene para pagar sus deudas, los funcionarios se incrementan y se dan una vida de lujo.

Tengamos presente que el gobernador panista Guillermo Padrés al igual que los políticos de otros partidos, en lugar de revisar las cuentas públicas estatales y municipales y fincar responsabilidades a los funcionarios del gobierno de Eduardo Bours para resarcir el daño patrimonial, se fue por la fácil, lastimar a la mayoría de la población con una la alza y nuevos impuestos, para pagar los intereses de la deuda, que evitaría la quiebra financiera.

Sobra decir que gobierno tiene todas las atribuciones y facultades para cobrarnos, imponernos obligaciones, crear ‘dolorosos pero necesarios’ nuevos impuestos y alzas a los establecidos, para cubrir los cráteres financieros dejados por sus antecesores, reconocer derechos y justas demandas a quienes no producen ni pagan y como buenos tecnócratas, cobran lo que ordena una computadora programada por ellos.

Está visto que la voracidad recaudatoria del gobierno sonorense no tuvo límites al pretender cobrar 100 pesos por tenencia de burros y caballos, en forma grotesca se manifestó el síndrome de santana, que generó en las redes sociales del Twitter y Facebook un alud de comentarios críticos y burlescos contra el gobierno estatal.

Como queda dicho, la noticia del cobro a burros y equinos en Sonora trascendió a nivel nacional. En gira por Nayarit, el titular de la Sagarpa, Enrique Martínez, dijo sentirse sorprendido sobre la pretensión de la entidad para gravar con 100 pesos por concepto de tenencia a los semovientes, caballos y burros.

Por otro lado la reforma fiscal promovida por Padrés ha provocado el rechazo de los sonorenses quienes han manifestado públicamente sus protestas en las principales poblaciones de Sonora, en contra del impuesto contribución del fortalecimiento municipal, la tenencia vehicular y el impuesto a la producción, sacrificio y tenencia de ganado asnal entre otros, afectan a la economía familiar.

Se dice que los gobiernos estatales y municipales tienen la necesidad de encontrar alternativas para mejorar el perfil de sus deudas y buscar la mejor manera de financiarlas. Al efecto algunas soluciones que se han planteado enfrentan dificultades legales, como la falta de definición y alcance del concepto inversiones productivas.

Del mismo modo es un error político tratar de sanear, la economía de las entidades federativas a través de la vía impositiva, máxime tratarse de una época de crisis económica y de seguridad, por lo que deben buscarse otros mecanismos para obtener otras fuentes de financiamiento y reducción del gasto corriente.

En definitiva el gobierno sonorense en su afán recaudatorio para salir de la quiebra financiera en que se encuentra el gobierno estatal, son capaces de extender el impuesto para cobrarle tenencia a perros, gatos y otras mascotas, además el Impuesto especial sobre puertas y ventanas, y porque no cobrar también por la luz natural y el aire que se respira.
Twiter: @luiscarrs







No hay comentarios.:

Publicar un comentario