viernes, 23 de mayo de 2014

Bullying Mortal.


Hector Alejandro Méndez Ramírez
Tamaulipas México.- El acoso escolar o Bullying en ingles, es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma reiterada tanto en el aula, como a través de las redes sociales, con el nombre específico de ciberacoso. 

Los protagonistas del hostigamiento y víctimas suelen ser niños y niñas en proceso de entrada en la adolescencia.

Viene a cuento lo anterior porque no obstante existir una Ley para la Prevención de la Violencia en el Entorno Escolar del Estado de Tamaulipas y su programa correspondiente estos ha sido letra muerta para las autoridades educativas, personal directivo y docente de las escuelas, a Héctor Alejandro Méndez Ramírez lo mataron sus compañeros de escuela como consecuencia del Bullying.

En efecto el alumno inmolado cursaba el primer grado en la Escuela Secundaria número 7 "Eleazar Cervantes Gómez", de Ciudad Victoria, sus agresores escudados en que todo “era un juego”, terminaron con la vida de una persona, víctima de las lesiones que le produjeron cuatro compañeros, quienes lo balancearon en "columpio" y lo estrellaron contra una pared.

Sobra decir que los victimarios responsables son menores de edad, pero conforme a la Ley de Justicia para Adolecentes, la regla general es que no podrá privarse en ningún caso su libertad si cuentan entre 12 y 14 años.

Cabe indicar que excepcionalmente la restricción de libertad se utilizará sólo como medida extrema de tratamiento, dictándose por un tiempo determinado y por el plazo más breve posible, por la comisiónde conductas tipificadas como delitos en las leyes penales y calificadas como graves en esta ley.

En cuanto al personal directivo y docente la responsabilidad podría ser de tipo administrativa en términos de la Ley para la Prevención de la Violencia en el Entorno Escolar del Estado de Tamaulipas y de responsabilidad penal si por negligencia toleraron la violencia, sin tomar las medidas para salvarle la vida a Héctor.

Por otro lado existen graves lagunas en la legislación de la materia para el combate al bullying misma que se quedo corta. Aquí surge la pregunta obligada ¿Cuál es la responsabilidad de los padres de los agresores de Hector?

Por otra parte, cuando se habla del bullying escolar, estamos hablando en su mayoría de niños y adolescentes víctimas y victimarios. ¿Porque a los segundos solo se les privaría de su libertad solo como medida extrema de tratamiento por tiempo breve si las consecuencias de sus actos son como en el presente caso un homicidio? ¿No es tiempo para legislar al respecto?

En ese contexto el tema del bullying es hoy más conocido que en el pasado. Gracias a las redes sociales del internet se tiene conocimiento de un número mayor de casos. El fenómeno, por su parte, ha sido cada vez más investigado por la academia, y en otros estados ya hasta lo han definido como delito.

Conviene señalar que lo único realizado para combatir el Bullying son los programas para su prevención, creación de los protocolos que deberian servir para hacer frente a los casos que se presentan, pero en los hechos no operan ni se aplican, el gran hueco también se presenta en la legislación materia de justicia para adolecentes donde no se emiten condenas de la dimensión del problema.

En ese tenor solo se espera la determinación del Ministerio Público del resultado de las averiguaciones previas para ejercicio de la acción penal en contra de los probables responsables ante los jueces penal y de justicia para adolecentes, para que resuelvan su situación jurídica.

En definitiva para combatir el bullying habrá que darle una sacudida Consejo para la Prevención, Tratamiento y Erradicación de la Violencia Escolar en Tamaulipas; a las autoridades educativas, y al personal directivo y docente de las escuelas y desde luego reformas a la legislación de la materia, para que no se repitan los hechos trágicos mortales como el caso de Héctor Alejandro Méndez Ramírez.
lucarrso@hotmail.com
Twitter @luiscarrs



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